viernes, 5 de septiembre de 2008

CBC (Cada Bruto Caminando)

Es un hecho y hay que admitirlo: a mucha gente le encanta fingir lo que no es. Parecer más. Ser mejor. Está el típico agrandado, ese que todos sabemos que en realidad es un bobolón pero lo dejamos ir por el mundo con la cabeza en alza, hasta que en algún momento se estrole contra la pared y se rompa la nariz. Digamos que me molesta un poco, pero zafa.
Mucho más detesto al falso intelectual. Porque para ser intelectual, creo yo, hace falta haber estudiado, leido, recorrido, intervenido y conocido. En cambio, haber metido, con muchisima suerte, medio CBC no alcanza para nada. A ver si me explico: yo estoy haciendo el CBC, ya hice la mitad, un cuatrimestre, pero no por eso me creo más inteligente o más algo que hace unos meses. Ni loco. Considero que sigo siendo el mismo tarado, solo con un par de fotocopias leídas y materias aprobadas.
La cuestion es que hay otros que en estas misma situación piensan que están a un pasito de ganarse el Nobel...o no se, un Oscar. Y no lo están, pero se la creen! Están convencidos que son unos genios, que hacer la carrera es un tramite, que ya están tocando el título con las manos. Este es el caso de un compañerito que no se como se llama, pero que se mandó un par que quedarán en mi rencorosa memoria:

"Nosotros, como cientistas sociales, debemos tener una mirada más amplia".
Pues eso lo serás vos, porque yo no me considero ningún nada. Flaco, no tenés la capacidad de analizar nada que un egresado del secundario no pueda, porque eso es lo que sos. Estás en el CBC, no en cuarto año de sociología.
Por suerte, un rato después volviendo a decir algo (porque es una de esas personas que da sus opiniones y sus argumentos, pero que en realidad son muy cortitos y para decir varias oraciones simplemente dice lo mismo de varias formas distintas y cambiando el orden de las palabras) se corrigió y se considero "futuro cientista social". Pero bueno, al menos se tiene fe.

De todas maneras, la máxima fue la de hoy. En el marco del paro docente, en Ciencia Política decidimos hacer una "clase pública" (lease morirnos de frio sentados en el piso en el hall de entrada de la sede) y sobre el final se armó un pequeño debate sobre las medidas de protesta y otros temas, a lo que el susodicho expresó su elaboradísima y sofisticada opinión. No recuerdo el hilo de su argumento (por suerte), pero sí la parte mas graciosa:
"quizas no hagamos algo HIPER GRANDILOCUENTE pero..."

Pero nada. No escuche más. No me acuerdo de otra cosa. Me quedé azorado, maravillado, impactado, anodadado (como para usar palabras que estén a su nivel) de semejante comentario ridículo, solamente realizado para llamar la atención y para que el resto diga "uau, que gran ciestista social que es!"

3 comentarios:

maru dijo...

Qué payaso ese compañero que te tocó.

Una vez en la facultad de filosofía le pregunté a un chio si tenía hora. Y me dijo: "Yo estudio filosofía!".
Yo me quedé mirándolo porque no entendía qué huso horario se estaba refiriendo. "No creo en el tiempo", me contestó antes que yo esbozara alguna palabra.

Impresentables hay en todos lados.

Beso

Anónimo dijo...

Mas que un cientista es un pelotudo.

Fausto ! dijo...

coincido con Leandro